05 noviembre 2013

¿Hasta cuándo, Wert, seguirás abusando de nuestra paciencia?

  No acostumbro a usar este blog para desahogarme. Me parece de mal gusto, ventajista y quizá a veces hasta injusto. Pero hoy voy a hacer una excepción y me voy a quedar a gusto. Creo que nado a favor de la corriente porque sí es verdad que se puede engañar a muchos algún tiempo, a algunos mucho tiempo, pero no a todos todo el tiempo. Wert, José Ignacio, en cambio, no engaña a nadie. 

  Mi relación con Wert, como la de muchos otros, es muy anterior a su nombramiento (que Alá confunda al Mariano que lo hizo) como Ministro de Educación del Reino de España. Era contertulio de política y actualidad en la emisora de radio Cadena Ser en el programa matinal "Hoy por hoy", primero con Iñaki Gabilondo y después con Carles Francino. Para los no iniciados, los contertulios son expertos que opinan de actualidad, lo humano, lo divino y Cataluña. En la Cadena Ser Wert ejercía de "liberal" (o sea derechista o conservador) civilizado, no muy "facha", no muy sectario y al parecer, cultivado. Al menos eso es lo que pensaban en la SER. Los oyentes sabíamos (no he hablado con todos pero me juego una merienda a que la gran mayoría lo pensaba) que era un tipo relamido, fulero y charlatán. Acostumbraba a cortar la palabra a los demás contertulios, se gastaba con ellos ironías de sobrado y rara vez se ajustaba al tiempo concedido.

  Una cosa estaba clara. Le encantaba hablar sin datos, dárselas de listo y estaba encantado de haberse conocido. De modo que darle el Ministerio ha sido como darle una navaja a un mono.

  Las felonías de Wert son por todos conocidas. Están escritas en una infame ley de educación, cuya vida será corta, como cualquier ley de educación española. Quizá no tan importante, pero si más detestable ha sido la decisión de retirar la beca Erasmus a estudiantes que ya disfrutaban de ella. Detestable por lo que supone la ruptura de un contrato, dejando sin unos ingresos básicos a estudiantes que ya contaban con ese dinero para el mes y completar su estancia en el extranjero.

  La beca Erasmus siempre ha sido escasa. Sin ella muchos no hubiéramos vivido nunca en otro país para estudiar un idioma extranjero. Pero seamos sinceros: a Wert le importa tan poco la igualdad de oportunidades como a mí los cuadros de Rablaci. Es más, de la misma manera que nuestros amigos del norte de Europa quieren poner de rodillas a los mediterráneos, la élite española quiere quitarse la competencia, que ya resultaba molesta, que los hijos de las familias más humildes hacían a los "José Ignacios" del solar español.

  Por otro lado, los 180 euros al mes que Wert dejará de pagar a los estudiantes Erasmus españoles no le alcanzan al ministro ni para cubrir sus necesidades pecuniarias de una tarde. Es una infame calderilla para un mortal, pero un dineral para el Ministerio.

  Su novia, a la sazón Secretaria de Estado de Educación, le hablará en el almuerzo de los millones de euros en juego en su divorcio; y mientras su ex mujer se desgañita defendiendo su reforma educativa en los medios de comunicación. ¿No es conmovedor lo que puede hacer el amor? Dirán que mezclo churras con merinas y que nos es elegante que me meta en un terreno privado. Dirán que es bonito que reine el amor en el centro de trabajo, pero también alguien podría asegurar que el Ministerio de Educación no es lugar para ligar, sobre todo cuando se es ministro. Pero los unos y los otros coincidirán que todo tiene un aire de bodevil barato y que la última vez que Wert vio a un pobre fue hace años, en una hucha del Domund.

  Yo te maldigo, José Ignacio Wert. Acabarás de contertulio de Intereconomía (o de una cadena aún más cutre) y quien sabe si soltero. ¿Ves a Miguel Ángel Rodríguez, el que fuera poderoso portavoz del gobierno?  ¿Has leído el Retrato de Dorian Grey? Pues eso.



El humor está aquí, en alguna parte
Síguenos en Facebook y Twitter

14 comentarios:

  1. la navaja se la quitaron a un mono que era zapatero

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por aclararnos que Wert trabaja a las órdenes de Zapatero.

      Eliminar
    2. No si ya lo digo yo pues me extrañaba que no apareciera ZP por estos lares pues como el
      mejor siempre tiene la culpa de todo,yo queria saber que es lo que no ha hecho

      Eliminar
    3. ¿Zapatero y acabamos de empezar? A este ritmo, en nada se cumplirá esto... http://es.wikipedia.org/wiki/Ley_de_Godwin

      Eliminar
  2. No quite las Becas pero reduzca el deficit y pague los intereses( 37.000 mil millones de euros) y la deuda: Bruselas. Cuadre el circulo. Más antisocial que no tener trabajo y pasar hambre que hay.

    ResponderEliminar
  3. ElSeñorGordo - "darle una navaja a un mono" - exactamente, es sólo que Wert con su poder ilimitado alcanza bastante más que un mono, por desgracia, puede acuchillar todo el país, y a gusto

    ResponderEliminar
  4. espero que la rueda de prensa (sin preguntas supongo) sea para anunciar su dimisión

    ResponderEliminar
  5. Der Wahnsinn der Normalität una gran obra!

    ResponderEliminar
  6. Esto es lo que yo llamo una opinión "no sectaria"

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No tiene porqué ser no sectaria, es su blog. De hecho, comienza el post con un disclaimer.

      Eliminar
    2. Preferiría que no se ofendiera por lo que voy a decir, pero ¿tan difícil es hablar español sin tener que echar mano del inglés? Ya sé que en español se precisa más de una palabra para decir eso de "disclaimer", pero no me imagino a los angloparlantes haciendo lo mismo que usted en los casos inversos, es decir, diciendo una palabra en español en vez de tres de las suyas. No entiendo ese empeño en cargarse un idioma que es el nuestro.

      Eliminar
  7. No lo puedes describir mejor, irónico, sobrado, mal educado, sin dejar hablar a los demás, se las da de listo, y está orgulloso de ser popular. Lo conozco en persona desde hace años y doy fe de ello. Excelente descripción de este señor.

    ResponderEliminar
  8. Si la envidia fuese tiña...

    ResponderEliminar
  9. El problema es que este botarate ha dejado un buen mojón. Y es que cuando un imbcil desaparece todavía queda por hacer desaparecer su legado. Será cuestión de tiempo.

    ResponderEliminar

¡Gracias por tu comentario!