¿Qué nivel tenemos?

  ¿Qué país mandó a un equipo de baloncesto de discapacitados intelectuales a los Juegos Paralímpicos de Sidney que consiguió ganar el oro? Una pista: Es...Espa... España.

  ¿Qué país mandó un equipo de baloncesto de discapacitados intelectuales a los Juegos de Sidney que ganó el oro y que resultaron no ser discapacitados intelectuales? Una pista: Es...Espa...España.

 ¿Qué país mandó discapacitados intelectuales que no eran discapacitados intelectuales a unos Juegos Paralímpicos cuando sólo eran deportistas con discapacidad ética con altos valores de caradura tóxica y no los han sancionado? Una pista: Es... Espa... España.

  A los españoles  nos encanta comentar este tipo de noticias. Se utiliza un tono para ello que va desde una melancólica resignación a un cinismo guasón. ¡Qué país, qué país! Casos así nos parecen dar el nivel del país. Desde luego las trampas no son privativas de los españoles ni de los latinos. Si de trampas deportivas hablamos seguramente ninguna tan ingente como la de la República Democrática Alemana. Pero sí es cierto que mandar a fulanos haciéndose pasar por discapacitados para ganar una medalla tiene un fuerte sabor ibérico. Remonta a Rinconete y Cortadillo, al Lazarillo, a Mortadelo y Filemón, a Bárcenas, a los libros de Luis Carandell, a Félix Millet. ¿Ese es el nivel del país? ". No seamos injustos, no generalicemos.

  Ya he comentado en alguna ocasión que como buen cuarentón, pero con mente de deportista de élite, he dejado el fútbol por el pádel. Entiendo que luego dejaré el pádel por los paseos y luego los paseos por los gintonics.

  Los clubes de pádel tienen la costumbre de hacer ligas entre sus jugadores. No sé si saben que el grado de destreza de los jugadores se establece por niveles. Así el nivel 1 sería el nivel principiante y el 7 el más avanzado. En un ataque de optimismo, tras un buen partido pensé en entrar en una liga en cuarta. Alguien sensato me lo desaconsejó. ¿No te fías de mi juego? —No—. Es que los de tercera se apuntan en cuarta y los de cuarta en quinta... Es decir todos tienden a bajar su nivel...para ganar.

  Hay en España otro curioso nivel. Es el nivel intermedio que aparece en los currículums. Nivel intermedio de inglés quiere decir que sólo eres capaz de decir Manchester United y Wimblendon. Intermedio avanzado sería el nivel del presidente del Comité Olímpico Español ("no listen the ask"), Avanzado te permite decir con soltura frases encabezadas por "however".

  Durante los años de la precrisis en los que todavía alguien podía aspirar a encontrar un trabajo, los aspirantes modificaban según las circunstancias su nivel profesional. No eran pocos los que inventaban cursos, idiomas y habilidades que no poseían. Pero también eran legión los que preferían eliminar masters realizados, carreras e incluso doctorados para no mostrarse "sobrecualificados" para el puesto.

  Según el informe PISA que hoy publican los periódicos, España es el último país de la OCDE en matemáticas y el último en lectura. Esto último supone que la gente no sabe escribir y que además no entiende lo que lee. Con todo respeto a los que pierden diez minutos de su vida leyendo este blog, de esto último ya me había dado cuenta por el contenido de algunos comentarios.

  Pero quizá generalizamos. Quizá engañamos a los expertos del informe PISA. Quizá nuestro nivel sea superior, pero aspiramos a participar en unos Juegos Paralímpicos como discapacitados en comprensión lectora. Y si participamos (aunque vayamos partido a partido) que nadie dude que iremos a ganar. Tenemos nivel de sobra.

El Señor Gordo

El humor está aquí, en alguna parte

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