27 noviembre 2012

El orgullo de trabajar con Ken Loach

  En mi  etapa de estudiante Erasmus en Inglaterra, en el año 1994, me alojé en casa de una señora que había sido actriz. Ya jubilada, se dedicaba a dirigir un grupo de teatro amateur. Mi experiencia sobre los ingleses es que hay de dos tipos.  A unos los podremos catalogar como ignorantes pendencieros y algo racistas (no confundir con los aficionados a Benidorm). La segunda clase cultivan como deporte nacional la ironía, la excentricidad, el sentido del humor, el ingenio y tienen cotas de generosidad inalcanzables incluso para los españoles generosos. Soy consciente que dividir a todo un país en dos bloques no deja de ser una burda simplificación, pero, por si no se ha enterado, esto no es un blog de antropología ni mucho menos de filosofía.

  Sigamos... Mi casera pertenecía al segundo tipo. Pizpireta, culta y excéntrica. Cuando la conocí su grupo estaba trabajando en la obra de Arthur Miller "Muerte de un viajante". Desayunaba pomelo y cenaba varias copas de vino blanco español que la hacían cantar.  Obviamente se sentía sola, y si el estudiante de turno era un soso español, no ayudaba. Sus hijos trabajaban en el extranjero. Uno como ingeniero informático en Bruselas. El otro era "conductor" en Prince George (Canadá) y, en mi clasismo e ignorancia del inglés, no entendía cómo se podía estar tan orgulloso de su empleo en la empresa de transportes. Yo tenía curiosidad por su vida profesional, pero, quizá vergonzosamente no me atrevía a preguntar por su carrera de actriz. Era evidente que no había sido famosa, y, a juzgar por su casa, había conseguido vivir dignamente pero  desde luego no amasar dinero. Un día me decidí a sacar el tema.

  "Oh my dear. Pequeños papeles, ¡pero he trabajado con Ken Loach! ¿Sabes quién es? "beautiful person, beautiful person..." Sin haber sido un fan del famoseo, ocurre sin embargo que cuando un amigo de un amigo te cuenta que un día conoció a la celebrity fulanito y te lo cataloga como yo lo hice con los ingleses (cajón de malvados y cajón de excelsos), queda como una marca indeleble en tu cerebro, que, en momentos de ensoñación te puede llevar a creer que en realidad fuiste tú el que le conoció. Y aunque nunca he tenido el gusto de conocer a Ken Loach, desde que mi casera entonó con su mayor orgullo profesional el haber estado a las órdenes Ken Loach, y que además se trataba de una persona excelente, ya no he visto sus películas de la misma manera. He disfrutado con las buenas y sufrido más de la cuenta con las fallidas, como "Tierra y libertad".

  Por eso me ha encantado reencontrarme con Loach gracias a "La parte de los ángeles" (The angel´s share). Al realismo social propio de las películas de Loach, el realizador inglés añade una parte de comedia, casi de cuento fantástico, que la hace una película amable y optimista, sin renunciar a los principios inspiradores de su cine. Y eso me da pie a mencionar otra de mis estrafalarias hipótesis, y que elaboré trabajando en una residencia de ancianos. A medida que envejecemos condensamos nuestra personalidad y al final de los días la hacemos prístina. Los malvados más malvados, los bondadosos más bondadosos.

  Con más de setenta y cinco años y decenas de películas, Loach no sólo es una referencia del cine social sino que además parece que mi casera, tenía razón.
 

Mi Ken Loach favorito:
  • Agenda oculta (Hidden agenda) 1990. Enfrentamiento de la justicia con la razón de estado en el escenario de la Irlanda del Norte de los años 80.
  • Riff-Raff (1991). Extraordinario retrato social de Gran Bretaña. Interpretación excepcional.
  • Lloviendo piedras. (Raining stones). 1993.  Vivir precariamente es mucho más que no poder llegar a fin de mes.



4 comentarios:

  1. Tengo cierto repudio por la bandera pirata, somos países (argentina - inglaterra), tan alejados con historias muy cercanas.

    Pero se puede catalogar a las personas según su Nacionalidad?, sí. Pero si las hemos de juzgar, que sea con una vara que mida sus pensamientos expresados o por sus valores naturales.

    Disfruto mucho de la ironía inglesa, como de su humor y porqué no, de su música.

    Porqué tendremos la creencia de que siempre hay que triunfar para ser alguien?. Es mejor triunfar en la vida, amigos, familia, valores... etc.

    Saludos made in argentina
    (no tengo idea de quién será Ken Loach)

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  2. Es uno de mis directores favoritos desde que vi RiffRaff. Estuve a punto de verlo en persona(un sueño hecho realidad sería)en una conferencia que se suspendió, cuando los disturbios de la Cumbre del G20 en Londres 2010.
    Cuando la vida no quiere no hay manera.
    A ver si puedo conseguir la pelicula que mencionas.
    Saludos.

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  3. La primera vez que embarque en un espadero mi padre me dijo: Hijo, ahora vas a saber cual es el pan que el demonio amasó. No le faltó razón pues las condiciones de trabajo y vida en esos barcos son durísimas (al igual que en muchos otros) Allí, en aquel entorno conocí a Veiticinco. Un día le pregunté por qué le llamaban así, y este, con una alegría cotagiosa, me contesto: ¡Porque el veiticinco es Navidad! Más tarde comprendí que la navidad a la que se refería no es una fecha comercial o un evento social o religioso, sino algo tan profundo y complejo que necesitaría un libro, de buen grosor, para definirlo.

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  4. Me gusta Ken Loach y los ingleses en general, sobre todo los segundos que mencionas, Inglaterra seria un país en donde podría vivir tranquilamente, si no fuera por el puñetero clima que tienen.
    Me gustó tu historia.
    Saludos

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